TONI RÜDIGER
LA PEOR PESADILLA DE CUALQUIER DELANTERO.
BE THE PROBLEM.
El mundo no es justo y Toni Rüdiger sabe que la gente no consigue lo que merece. Consigue lo que exige.
El choque que nunca vieron venir
El juego de Rüdiger se basa en su compromiso. Cada sprint, cada bloqueo y cada desafío. Compite como si se lo jugara todo. Porque, para él, siempre es así. Las jugadas implacables necesitan diseños que aguante el ritmo.
La peor pesadilla de cualquier delantero
Por aire y por tierra. Rüdiger es una pesadilla como oponente porque es rápido, valiente y siempre va un paso por delante.
No pretende complacerte.
Rüdiger no juega para complacer a nadie. Juega para hacerse notar. Ya sea con una entrada contundente o tomando decisiones valientes, siempre destaca.
"No juego para gustar a nadie. Juego para hacerme notar.
Si te acuerdas de mí, es porque he hecho lo posible para que me recordaras".